Descubre como elegir el vestido de baño ideal según la forma de tu cuerpo y tu color personal.
En época de verano nuestro cuerpo está más expuesto que de costumbre.
Antes se acudía al mar para mejorar la salud y el cuerpo, mientras que en la actualidad primero se perfecciona el cuerpo para luego ir a disfrutar de las bondades del mar.
¿Bikini o enteriza? ¿Mostrar u ocultar? ¿Cómo ganar sensualidad y elegancia con esta prenda tan exigente?
En la evolución del atuendo playero hay mucha tela para cortar.
A partir del siglo XIX los baños de mar se recomendaban principalmente a las mujeres de la ciudad, que llevaban una vida sedentaria y permanecían incómodas con sus ostentosos vestidos que les impedían los movimientos y la sensación de libertad.
El traje de baño nació cuando se abandona la costumbre de “remojarse” en el mar para pasar a practicar natación.
Así se comienza a diseñar prendas que permiten el desempeño de esta actividad.
Lejos quedaron las medias, faldas y zapatos para ir a bañarse a la playa.
Durante los locos años veinte, Coco Chanel a la cabeza de las mujeres liberadas de esa época que fumaban, bebían y salían de noche, decidieron llevar prendas básicas para sus viajes estivales a la Costa Azul.
Recortaron el largo de los pantalones de punto, armando conjuntos playeros que consistían en short y camiseta.
En la década del 30, aparece la primera silueta similar a los trajes de baño de hoy.
Surge el primer bañador femenino con un escote similar a una camiseta, acompañado por un pantalón confeccionado en lana.
Este atuendo luego de mojarse llegaba a pesar más de tres kilos.
En este tiempo, surge a la vez la moda de lucir el cuerpo bronceado.
El color en la piel ya no indicaba una vida laboral campesina, sino la capacidad económica de poder pasar varias semanas descansando junto al mar en los nuevos resorts.
El mar se convierte en un lujo, apreciado por sus cualidades curativas y también de descanso y relajación.
La moda de la época recorta nuevamente los pantalones y aumenta el escote sobre textiles elásticos que permitían a las prendas adherirse al cuerpo.
Con el correr de los años, el traje de baño se impuso como símbolo de libertad.
La sociedad buscó la manera de expresar de alguna manera la autonomía de la mujer.
En ese contexto aparece un ingeniero francés, Louis Reárd cuya familia tenía una firma de lencería.
Tras la segunda guerra mundial retoma el negocio familiar.
En julio de 1946 inventa un bañador “explosivo” de dos piezas que representaba innovación y a la vez provocación para ese tiempo.
En aquel entonces, aparecían en la prensa noticias relativas a las pruebas y ensayos nucleares que se realizaban en el atolón del archipiélago de las islas Bikini, en el Pacífico.
Dos explosiones, una atómica y otra «anatómica» ocurrieron en el mismo año.
En primer lugar, Estados Unidos realiza en el atolón Bikini, una prueba de bomba atómica.
Seguidamente Louis Reárd convocó a una bailarina de un Casino de París, Micheline Bernardini, para lucir su creativo diseño.
Y ante la pregunta de cómo podría llamar a la nueva prenda ella contestó:
¡Su bañador va a ser más explosivo que la bomba de Bikini!
«El bikini”, una bomba anatómica», decía el eslogan sobre los diminutos trozos de tela que consistían en una banda para la parte de superior del cuerpo y dos triángulos invertidos para la parte inferior.
La llegada del bikini es todo un acontecimiento en la historia de la moda, porque revela lo que las mujeres no se atrevían a enseñar hasta entonces, el ombligo.
En los años 1950, las damas decidieron pasearse por la playa en bikini. Tal vez fue un gesto de rebeldía ante la sociedad conservadora de la posguerra.
A pesar de estas primeras prohibiciones, las mujeres demostraban que tenían el derecho de llevar lo que quisieran, lo que les garantizaría con los años, un espacio en la sociedad que las marginaba.
El bikini fue uno de los inventos más revolucionarios de la moda ya que liberó la silueta femenina del antiguo corsé.
Fue valorado por ayudar a la emancipación de la mujer y a la vez criticado por convertirla en objeto de deseo.
Años más tarde, el estilista californiano Rudi Gernreich inventa en 1964 el topless, que consistía en un bañador negro sostenido por dos tirantes que dejaba a descubierto el pecho.
En 1974 aparece en Brasil la tanga, inventada por el genovés Carlo Ficcardi.
La imagen ideal se representaba con el cuerpo femenino libre.
Poco a poco se irían abriendo caminos hacia otras maneras de Ser y actuar para esta nueva Mujer.
Los años 60 llegarían con novedosas propuestas para la silueta y también para los derechos femeninos.
La famosa y explosiva prenda, el bikini, acompañaría a las mujeres durante todos esos procesos de cambio.
CUERPO DE MUJER
“La moda es como la arquitectura, todo depende de las proporciones”
Cocó Chanel
Los trajes de baño tienen el poder de resaltar o esconder los atributos de la silueta.
A continuación te proponemos 3 claves a tener en cuenta a la hora de elegir tu traje de baño:
1. TIPO DE CUERPO. Es fundamental saber qué forma de cuerpo tienes, para recién después elegir el diseño.
Si será bikini o enteriza, dependerá de las líneas que conforman tu silueta, de esta manera lograrás cautivar las miradas en la playa con tu sensualidad y elegancia.
2. EL COLOR. Los tonos más atractivos serán los que armonizan y recrean el paisaje marino: los colores del agua: azul, celeste, turquesa, verde agua, blanco y los tonos que aparecen durante el atardecer de verano: rosa, lila, naranja, amarillo.
Completa tu atuendo playero con accesorios coloridos, que complementen tu matiz personal o crea tu paleta con colores en contraste, por ejemplo, vestido de baño amarillo acompañado por un pareo violeta.
Los sombreros, pañuelos, bolsos, ojotas, bijouterie brindan la posibilidad de añadir luz y color a la vestimenta de verano.
Siempre deben ir en armonía con tu tipo de cuerpo y estilo personal.
3. EL LENGUAJE DEL CUERPO- AUTOCONFIANZA.
El Estilo de una mujer también se evidencia y enfatiza al caminar, saludar y comportarse en ambientes más relajados, como en la época de vacaciones.
Tener estilo significa conocerte y estar a gusto con vos misma, con lo que eres, con lo que haces, con tu cuerpo y sus atributos.
1. EL CUERPO
Conoce cómo está delineada tu silueta para sacar partido a las zonas más atractivas.
– Si tu cuerpo tiene forma A o también llamada silueta pera, te caracterizas por tener las caderas más amplias que los hombros.
Tus caderas y muslos son curvilíneos. Todo el peso se concentra en esta parte del cuerpo.
Tienes la cintura definida y el busto pequeño.
El objetivo será potenciar la parte superior de tu cuerpo.
Te favorece especialmente el bikini con corpiño armado y breteles finos, mientras que la parte inferior será discreta, con tiras laterales amplias que sostengan y ayuden a equilibrar tus caderas.
Los modelos estilo short son ideales ya que crean la ilusión óptica de una cadera más estrecha.
Si tienes este tipo de cuerpo también puedes dar rienda suelta a tu creatividad y combinar diferentes piezas,
Por ejemplo puedes llevar en la parte inferior un color oscuro como el negro que afine visualmente las caderas y para la superior opta por un color claro, puede ser blanco, que atraiga la atención hacia esta zona.
Añade a tu atuendo escotes, espaldas cruzadas, adornos, herrajes, drapeados, colores en degradeé.
Evita llevar tiras delgadas en la parte inferior, las piernas muy cavadas y los corpiños en forma de triángulo ya que acentúan la forma redondeada de las caderas y la parte superior estrecha.
Los modelos de competición aplanan el busto, al igual que el strapless y los corpiños en forma de banda.
-Si la forma de tu cuerpo es similar a un triángulo invertido o también llamada silueta T, significa que tienes los hombros más amplios que las caderas.
Es una figura muy atractiva, atlética, de caderas y piernas rectas, delgadas.
El objetivo será desviar la atención de la parte superior.
La solución para equilibrar tu silueta consiste en dar amplitud a la zona inferior de tu cuerpo y restar protagonismo a la parte superior.
Se trata de suavizar hombros y potenciar las caderas.
Sería ideal que la parte inferior de tu traje de baño sea de tiro alto ya que visualmente ayudaría a ensanchar las caderas y aportaría una silueta de líneas más femeninas.
Los nudos laterales, lazos, cambios de color, estampados, apliques, ayudan a aumentar el volumen en la zona de las caderas creando una silueta balanceada.
Los corpiños más favorecedores serán aquellos con breteles rectos y amplios, el escote en V, asimétricos, los modelos deportivos.
Los top lisos y monocromáticos serán tus mejores aliados.
– Si tu cuerpo es rectangular o silueta I, te caracterizas por tener los hombros alineados con las caderas, sin tener la cintura definida.
La meta es crear curvas con el traje de baño.
El secreto para equilibrar esta silueta es desviar la mirada de la cintura.
Es un cuerpo que luce con corpiños de diseño triangular, ajustados en la nuca, modelos drapeados adornados con volados, escotes asimétricos y cuellos que potencien los hombros.
Para la parte inferior, los flecos son un recurso que añade volumen. También los volados en pantys de corte clásico.
Resultan muy favorecedores los vestidos de baño altos de pierna y los enterizos con estampados que recrean la cintura.
Un truco para equilibrar la silueta consiste en dividir el cuerpo, llevando colores diferentes en la parte superior e inferior.
Los modelos con franjas laterales darán visualmente una sensación de tener curvas.
– Si tu cuerpo es proporcional o silueta X, significa que tu silueta es armónica y posee equilibrio entre hombros y caderas.
Posees busto y cintura definidos, nalgas torneadas, caderas estrechas.
Tus caderas tienen la misma medida de tu busto.
El equilibrio en tus medidas facilitará la elección del vestido de baño ya que cuentas con un amplio abanico de opciones que te favorecen.
Posees una gran variedad de opciones a la hora de elegir tu traje de baño: bikini, enterizos, lisos, estampados, coloridos, asimétricos, con adornos.
Un bikini que exhiba tu armoniosa figura es un clásico siempre que tu cuerpo esté tonificado.
Procura que los corpiños sean armados o en forma de triángulo con buen soporte.
Atrévete a lucir estampados y colores llamativos para sacarle provecho a tu silueta.
– Si tu Cuerpo es circular o Silueta O
Es un cuerpo de contorno redondeado.
La cintura es más amplia que los hombros y caderas.
Presenta mucho busto. El torso compacto.
El objetivo es alargar el cuerpo para ganar esbeltez.
Los mejores aliados son aquellos diseños que ayudan a moldear la silueta
Resulta muy favorecedor el traje de baño enterizo en tonos monocromáticos o con estampados que alarguen y estilicen.
Un detalle importante a tener en cuenta consiste en conseguir un buen soporte para tu busto ya que esto alargará inmediatamente tu torso.
Una muy buena opción son los vestidos de baño enterizos con paneles laterales de color que recrean visualmente la cintura.
Favorecen las tankini (camiseta y bombacha) en colores monocromáticos y oscuros, verde, azul, negro, vinotinto, sobre texturas lisas y preferentemente con escote en V y breteles amplios.
Puedes llevar estampados pequeños en la parte superior, hasta debajo del busto y también en los pareos.
La elección del corpiño es un detalle a tener en cuenta para realzar la línea de la vestimenta y lograr una silueta más esbelta.
Los senos son un factor decisivo en la sensualidad de la mujer.
Su tamaño y forma pueden influir en la forma de caminar, de sentarse, de actuar.
Constituyen un lenguaje de belleza y ternura.
Si tienes Mucho Busto
-Favorecen los corpiños en colores oscuros, los breteles amplios.
– Opta por llevar vestidos de baño lisos, con costuras internas y sin copa o relleno.
-Los escotes redondos son los más favorecedores.
-Si quieres destacarlo, la opción a elegir serán los corpiños estilo triángulo, siempre que tengas el busto firme.
– Evita espaldas muy escotadas, cuellos altos, estampados muy llamativos, diseños strapless, ya que al ser una línea horizontal agrandan aún más el busto.
-La clave será cubrir sin aplastar y lucir sin exagerar.
Si tienes poco Busto:
– Elige corpiños con aro y relleno. El push up puede ir con trajes de una o dos piezas ya que centra, aumenta y levanta el busto.
– Lucen especialmente bien los diseños con volados, drapeados, en colores saturados.
-Los estampados florales, rayas y lunares harán que el busto se vea ópticamente más voluminoso.
-Los enterizos con drapeado aumentarán visualmente el volumen.
Sugerencias antes de comprar un traje de baño
- El cuerpo del traje de baño enterizo debe quedar liso sobre la silueta sin hacer ningún tipo de pliegues.
- El cavado y cintura de la bikini debe quedar confortable y no ajustar demasiado el cuerpo.
- La línea más favorecedora del cavado es 2 o 3 cm debajo de donde comienza el hueso de la cadera.
- Los breteles deben sentirse cómodos, no hundirse en la piel.
- Si el corpiño tiene relleno, se verá natural.
- Los estampados grandes resultan demasiado llamativos aumentando el volumen corporal, mientras que las estampas pequeñas sobre todo en fondos oscuros ayudan a disimular imperfecciones.
- Las telas de apariencia mate (opaca) son más discretas que las brillantes.
- Los cinturones, herrajes, bordados, llaman mucho la atención. Asegúrate que se encuentren en la zona corporal que quieras resaltar.
- Los diseños muy elaborados o con texturas lucen especialmente en personas delgadas.
- Los trajes de baño de natación disimulan los problemas de flacidez.
- No lleves joyas ni uses perfume en la playa.
- Los perfumes con alcohol al exponerse al sol pueden producir manchas en la piel, sobre todo los cítricos, como por ejemplo los elaborados con bergamota.
2. EL COLOR
Los tonos más favorecedores para impactar tanto en la ciudad como en la playa serán aquellos que armonizan con el tono de tu piel.
Sien embargo, puedes dar rienda suelta a tu creatividad y añadir en el mar una pincelada de contraste para ponerle brillo y COLOR a tus días de verano.
Si tu piel es demasiado blanca inclínate por la paleta de colores fría como azules, violetas, negro.
Los colores cálidos vibran mucho al sol y ponen en evidencia las imperfecciones.
Combina tu vestido de baño con accesorios como pareos, sombreros, anteojos, bolsos.
Aportan femineidad y elegancia ayudando a equilibrar las líneas del cuerpo; por ejemplo un sombrero a juego con el bolso, puede desviar la atención de una cintura recta.
3. EL LENGUAJE DEL CUERPO
Para proyectar una imagen personal que luzca movimientos elegantes, el lenguaje corporal debe coincidir con el verbal.
Si queremos descubrir los mensajes que transmitimos con el cuerpo tenemos que conocerlo, moverlo.
Realizar acciones cotidianas como caminar, sentarse o pararse puede marcar una gran diferencia en la comunicación no verbal que trasmitimos a través de nuestra imagen personal.
Para lograr una buena postura primero tienes que tener conciencia de los gestos y movimientos que envía tu cuerpo.
Algunas claves para caminar con elegancia:
– Tu cuerpo debe permanecer derecho siempre. La espalda erguida con los hombros hacia abajo.
– Apoya toda la planta de los pies al caminar.
– Tu cadera irá alineada con el cuerpo, el pecho abierto.
– Los hombros relajados.
– La cabeza y el cuello estirados, mirando al horizonte.
– Mantené las rodillas firmes al caminar.
– Evitar dar pasos muy largos o muy cortos. Guarda un ritmo armónico entre brazos y pies.
– La respiración calmada, desde el abdomen. Toma conciencia de la respiración para equilibrarte y relajarte.
La respiración es importante para el buen funcionamiento del organismo ya que a través de ella podemos cambiar la postura, la actitud y el proceso de pensamiento.
Aprovecha los días de playa para hacer un alto en tu camino.
De vez en cuando, es preciso aminorar la marcha. Dejar de movernos para simplemente ESTAR con nosotras mismas, puede resultar muy beneficioso para tu belleza y bienestar.
Quédate un momento en calma ante la inmensidad del mar para simplemente dejarte invadir por las sensaciones que te produce.
Relájate. Observa, Medita, Contempla.
Escucha a tu cuerpo y aprovecha esos momentos para energizarte y renovarte.
AUTOCONFIANZA
Una actitud de aceptación de nuestro cuerpo es la piedra fundamental para cambiar la forma en que nos vemos y representa un paso decisivo para desarrollar una autoestima sana.
Cuando empiezas a aceptarte tal como eres, los cambios positivos se ponen en marcha.
Analiza quien eres, como eres, cual es tu estilo, cuáles son tus puntos fuertes y deseos más profundos.
Comienza por aceptarte internamente, que ya habrá tiempo y recursos para mejorar tu apariencia externa.
En lugar de comprar moda o hacer jornadas extenuantes de ejercicio físico, elige un traje de baño que sea bello y confortable para tu silueta.
Conoce como es cuerpo, que necesita, mimalo y encuentra ese ESTILO que se funde con tu personalidad, que te haga sentir bellamente atractiva y permita dejar la huella de tus pasos en tu playa favorita.
“Para mantener la elegancia, camina con la certeza de que nunca estás sola»
Audrey Hepburn
Diseñadora de Indumentaria. Consultora en Imagen Personal Femenina. Capacitación & Coaching.
Apasionada por el Arte, la Moda y el Desarrollo Personal.
Te acompaño a descubrir tu Verdadera Imagen y a diseñar tu Estilo con creatividad desde tu Esencia, para que hagas visible tu auténtica belleza, te sientas mejor con vos misma y proyectes esa seguridad que te aportará un Atractivo Irresistible.
veronica@imagendemujer.com
Super interesante el aporte!!!
¡Hola Arya!
¡¡Que bueno que te haya sido útil el post sobre vestidos de baño!!
Un abrazo!!